Curiosidades de Castresana

Recopiladas por Don Raimundo Senderos, Cura Párroco llegado a Castresana en el año 1888

Abarca prácticamente toda la historia desde el año 1804

Se trasladan aquí en el mismo orden conservando su formato literal y composición.

Se han marcado en azul las notas adicionales que no figuran en el original

1) En el día 6 de enero del año presente de 1888, yo Don Raimundo Senderos, natural de Zuñeda, del Partido de Briviesca Provincia de Burgos y Diócesis, toma en economato esta Parroquia de San Vicente Mártir de Castresana y su unida Villafría, siendo Arcipreste D. Zacarías Villamor. De mi entrada en este día 6 de enero no hay que decir nada, pues ya se sabe como suelen recibir los pueblos a sus ministros cuando vienen; Dios quiera que así sea la salida después de haber desempeñado fielmente el cargo.

Hasta el día 27 pasé a pupilo en casa del Sr. Narciso García, muy contento en aquel día vino mi padre y mis hermanas Elisa y Lucía con un carro de muebles y me puse en esta mi casa el día 28.

2) La noche precedente al miércoles de ceniza empezó a nevar cubriéndose el suelo que duró hasta el lunes de la semana mayor sin verse al descubierto más sólo dos días; les dejé a los de Villafría tres días sin misa por ser humanamente imposible el tránsito, tanto que, el domingo víspera de San José que subí, tuve que entrar por encima de todas cardas agarrándome a los árboles enganchándome la ropa y subir medio arrastras el pecho a la Iglesia: en fin; pensé de perder la vida por las repetidas celliscas.

Los nacidos no han conocido año o invierno de mayor crueldad y calamidades. Algunos decían que si el año 1829 fue parecido pero nada mas parecido, hubo días y creo no mentir, de haber de nieve, mas de 4 varas y media en general, pero con una vara de nieve lo más del tiempo.

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Curas y Párrocos anteriores ...

En el año 1804 falleció Don Bartolomé de Laya y Angulo cura beneficiado que fue de este lugar de Castresana.

En año 1806 tomó posesión de dicho beneficio Don Vicente Mata c.b. que fue de Villarán, falleció en 1836; porque resistía al pago de raciones le volcaron la puerta ciertos hombres malvados, le llevaron todos los panes recién cocidos y otras cosas, quien fue a Quincoces a dar parte de dicho atropello a un oficial militar amigo suyo, y como este había marchado ya a Villalba no pudo aquel desahogar su cólera, teniendo que volver a pie, como había marchado, muy sofocado a causa de su avanzada edad, de su gordura y por su afección moral, siendo preciso traerle desde debajo de Villabasil.

En 1840 tomó posesión de dicho beneficio de Castresana Don Ildefonso Ángel Mata sobrino del anterior, falleció en 1861 de edad de 54 años; trabajó muchísimo para que se hiciera la fuente que existe en el echadero del ganado (nombre vulgar que aquí se usa) junto a la ex-ermita de Santa Lucía; en su casa se hospedaba el fontanero Don Pío Ortiz Villota y como si esta molestia pareciese a algunos muy pequeña, el pueblo avisó a dicho Sr. Cura que fuera como todo vecino a trabajar a limpiar el pozo etc.,etc. Dícese que dicho Sr. Cura contestó “Voy a decir misa, después iré” concluida la misa se presento en propia persona con su azadón entre todos los demás vecinos, y como le dijeron por que no cambiaba el criado (que había tomado hacía pocos días) empezaron a cruzarse expresiones … y a los pocos días murió de un accidente apopléjico.

Sobre la casa Rectoral o vivienda del párroco ...

En 1807 se hizo a cuenta de la Iglesia parroquial el Hórreo o Granero para los diezmos y primicias de dicha parroquia al Norte de dicha Iglesia e inmediato a ella; tenía tres ventanas en el piso principal una a cada viento, de las que aún subsisten dos que son la del Norte y la del medio que está al Poniente, encima de esta hay un letrero que dice el año en que se hizo. Dícese que costo dicha casa más de 1.600 reales de Vellón. (Equivalencias de monedas, pesos y medidas)

En 1867 se habilitó para casa rectoral por D. Leoncio Ruiz, cura propio, sólo se hizo lo más preciso para vivir en ella, como las divisiones, puertas y ventanas para cada pieza; esta casa por lo fresca que es, se puede decir que en verano es una verdadera Granja, pero para invierno creo que no hay casa más fría en todo este pueblo.

Sobre obras en la iglesia ...

En 1870 se hizo la pila nueva para bautizar puesta debajo del coro.

En 1876 se hizo coro nuevo y se abrió ventana mucho mayor que la que tenía antes.

El dos de Mayo de 1877 se tiraron las campanas viejas, tituladas romanas por su forma, pesaron entre las dos 45 arrobas y 22 libras y se llevaron a refundir a Colindres; el 4 de junio del mismo año el maestro fundidor D. Fernando Ballesteros trajo las nuevas tituladas de forma de “Entretalla”; pesaron la una 21 arrobas y 15 libras y la otra 19 arrobas; importa la fundición 920 reales de Vellón, pagables en dos plazos; el primero en Septiembre de 1877 y el segundo en Septiembre de 1878 a 460 reales de Vellón cada plazo, saliendo el fundidor fiador por un año de las roturas de las campanas, las que han hecho sin licencia del prelado para evitar dilaciones y tramites impertinentes.

En la misma fecha se han gastado en materiales, convites, herrajes nuevos para poner las campanas de vuelta; 219 reales y 14 maravedíes y por la mano de los oficiales aproximadamente 400 reales más por hacer un poco de pared en el piso del campanario, balaustre, tejado, yugos de dichas campanas etc. etc. y aún falta teguillo y teja para poner el tejado del atrio según estaba antes. Toda la dicha obra de torre y campanas la pagaron a media entre la Iglesia Parroquial y el concejo de este lugar de Castresana. (Equivalencias de monedas, pesos y medidas)

Más párrocos ...

En 1862 tomó posesión de este curato de Castresana el licenciado Don Santos Ayala y Puras (primer cura propio) y se escapó o marchó a Baños, no esta claro, creo que a Buenos Aires en 1865 porque el ilustrísimo Cardenal La Puente, no quería agraciarle con otra pieza mejor que esta de Castresana en la que estaba aburrido.

En 31 de enero de 1867 tomó posesión de este dicho curato Don Leoncio Ruiz (segundo cura párroco), y antes de julio de 1868 en virtud del arreglo o desarreglo parroquial le unieron la Iglesia de Villafría sin retribución alguna y aunque estaba incomodísimo hasta no poder estar más, no pudo ir a concurso el año 1868 por estar enfermo y tampoco el año 1878 por tener otras aspiraciones que le salieron mal; por último hizo concurso el año 1885 y fue agraciado el año 1887 con el curato de Cardeña Jimeno.

Sobre enterramientos, Campo Santos y cementerios ...

El 31 de Agosto de 1834 se enterró el primer cadáver fuera de la iglesia Parroquial de San Vicente Mártir de Castresana, en el Camposanto nuevo que se hizo al norte de dicha iglesia, e inmediato a ella, costeado por dicha iglesia según se ve en las cuentas de dicho año de 1834; el cadáver era de Clemente Villamor; y el 4 de enero de 1856 se enterró el último que fue el de Justa García Ruiz, soltera.

En 20 de junio de 1856 se enterró el primer cadáver en el Campo Santo nuevo que se halla en una heredad del beneficio en el término titulado “El Senderillo de Ambilla” hecho por el mismo pueblo, (aunque a cuenta del monte) todos los vecinos trabajaron a portear material, excepto el famoso escribano Don Ramón de Paredes cuya esposa Doña María Ruiz Ballesteros fue la primera que se enterró en dicho cementerio; desde esta fecha no se cobran los derechos de rompimiento de sepulturas, pero se cobran los de la fábrica y se pueden cobrar los derechos de cubrir con cruces o ponerse en determinadas sepulturas en la iglesia arrendamiadas.

Sobre la fuente de arriba ...

En 1863 se inauguró la fuente de Santa Lucía hecha al Oriente de la Ex Ermita de Santa Lucía en este pueblo.

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